CONECTAR CON GUIAS ESPIRITUALES
CONECTAR CON GUÍAS ESPIRITUALESPor Alicia Sánchez Montalbán
Al conectar con guías espirituales estás accediendo al mundo de lo invisible, permitiendo que te hablen los seres de luz de alta vibración que te asisten.
Un ser de luz de alta vibración es algo parecido a un ángel. Quizás esa palabra te ayude a entender mejor el concepto, pero lo cierto es que un ángel es un tipo de guía espiritual. Están también los familiares y amigos que fallecieron y, desde la Luz, deciden ayudarte; los maestros ascendidos; los hermanos de las estrellas…
La función de un guía espiritual es la de acompañar, aconsejar, sugerir, proponer soluciones y cambios que, si los realizas, convertirán tu vida en una grata experiencia de gozo, sentirás paz y plenitud internas.
Al vivir desconectado de tus guías espirituales, sin escuchar lo que te dicen, es posible que te hayas sentido solo y perdido en muchas ocasiones. Sin embargo, cuando conectas con ellos y sientes su energía, percibes sus mensajes y te animas a poner en práctica lo que ellos te sugieren, tu vida cambia, tus emociones se transforman y te das cuenta de que, poco a poco, vas recuperando tu poder personal.
El poder personal es necesario para afrontar los retos con valentía, para tomar decisiones con seguridad, para avanzar en la vida sintiendo alegría. La alegría llega cuando uno se escucha a sí mismo y se hace caso, y esa, precisamente, es la función de tu guía espiritual: lograr que te escuches y que te hagas caso, para que tu vida mejore, para que te sientas bien en ella, contento, satisfecho de ti mismo, en tu lugar.
Todas las personas tenemos un lugar en el mundo: una situación de vida con la que nos sentimos en paz y llenos de gozo. Te apartas de ella cuando solo escuchas a tu mente, desoyendo lo que anhela tu alma o postergándolo. Con la ayuda de tu guía podrás recuperar la confianza en ti, animarte a dar los pasos necesarios, vislumbrar con certeza el camino.
Tu guía también te ayudará en los momentos difíciles. Es el mejor psicólogo al que puedes acudir, porque no solo te conoce bien, sino que además sabe lo que desea tu alma. No te recomendará medicamentos para que dejes de sentir; te enseñará a gestionar tus emociones. No solo te escuchará para que te desahogues; te hablará con amor y con dulzura, para que sientas su abrazo, para que resurjas de la tristeza con el consuelo que, sin duda, sentirás. Te darás cuenta de que verdaderamente no estás solo. Tu guía te acompaña siempre, y está disponible para ti veinticuatro horas al día.
No necesitas pedirle cita; solo pedirle ayuda. Él no puede intervenir en tu realidad sin tu autorización.
Cuando llamas a tu guía para que te ayude a salir de tu ofuscación, inmediatamente sientes alivio. Cuando le llamas para que te aconseje y te guíe, a la hora de tomar una decisión, te das cuenta de que hay una fuente de información infinita en tu interior y también en el universo, disponible para ti en todo momento, a la espera de que te decidas a solicitarla.
Mantener un contacto consciente con tus guías espirituales te ayudará a encontrar tu lugar en el mundo, a resolver tus conflictos, a superar tus pruebas de vida con responsabilidad y amor. Amor a ti mismo y amor a las personas que te rodean, porque todos llevamos dentro a un ser de luz maravilloso que, como puede, va abriéndose camino en la vida. Todos somos almas encarnadas viviendo una experiencia humana. Esa experiencia, desde luego, es infinitamente más grata y evolutiva en contacto con tus guías espirituales.
